Compro comida y salgo en moto para Vikos. Hoy es el dia del barranco del Vikos. Veremos si soy capaz de ir y volver. Los carteles anuncian que la ruta dura seis horas. Las vistas desde Vikos son impresionantes. Me llama la atencion que en el valle el rio se queda sin agua al poco rato. El paseo es una gozada. Hay zonas con arboles y rocas forrados de musgo. Para una pelicula. Encuentro serpientes, luciones, ranas y demas vichos. Tambien a algunas personas. Lo peor es la primera media hora y la ultima ya que son la bajada y subida a los pueblos. Lo demas es bastante suave aunque en algunos momentos con precipicios inclinados a un lado. El paseo es un encanto aunque en mi mente estan estos ultimos dias en el monasterio con esta gente tan maja, con esas montanas, con esa piedra… han dejado una huella muy fuerte.
He tardado tres horas y media en hacer el recorrido de ida.
Como en Monodendros. Cafe griego. Breve siesta y a deshacer el camino. No me encuentro apenas a nadie.
Media hora antes de llegar a Vikos escucho de nuevo el rio. Por curiosidad busco donde reaparece y veo que nace de colpe, de la montana, a borbotones. Todo un espectaculo.
Descanso un poco antes de volver a coger la moto y vuelta a Konitsa. Ceno (hoy tambien delicioso yogur de la abuela con miel). Unos senores en el restaurante me dicen si les conozco. Si soy espanol. Que me vieron en el monasterio. A mi no me suenan. Me dicen que charlaron conmigo. Hace cinco anos! Otro espanol que se parece a mi estuvo por aqui. Parece brujeria. Charlamos mientras toman la bebida tipica (el raki griego que no recuerdo su nombre) y platos suculentos. Hablamos en ingles de Grecia, de Turkia… mientras de fondo en la tele ponen Eurovision. A la una moy reventado a dormir. Otro dia completo!